El Estado de Hidalgo, nombrado así por el padre de la patria Don Miguel Hidalgo y Costilla, es hogar de los atlantes, esculturas de guerreros que habitaron en Tula, la fascinante zona arqueológica construida por los toltecas.
Cuna de la Charrería, espectáculo deportivo de arte ecuestre denominado por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Actualmente el Estado ha presenciado un gran desarrollo que lo ha posicionado como una de las regiones de mayor crecimiento del centro de la República Mexicana; con cerca de 2.9 millones de habitantes, ha logrado incluirse dentro las vibraciones globales que presenta el mundo actual, pero sin dejar de lado su esencia cultural que lo distingue claramente de otras regiones del país.